El retorno de los GIRGADO (y parte 3)

Aunque no lo dije, al llegar al archivo, cuando la amable archivera (Sonia) me preguntó lo que quería, le comenté mi interés en el apellido GIRGADO. Cuando lo vio escrito dijo “pues sí que es un apellido raro porque en un pueblo que hay cerca de aquí hay muchísimas personas con el apellido GILGADO” (Se refería a Brazuelo). En un momento dado, ella se acercó a un señor y vi que le comentaba algo. No tenia ni idea de que estuviese relacionado con mi búsqueda. Cuando volvió, al pasar por mi mesa, me dijo, señalando a aquel investigador, que aquel señor había escrito varios libros sobre la historia de Brazuelo, y que decía que los apellidos GIRGADO y GILGADO son realmente el mismo (tienen el mismo origen). Pero lo más sorprendente es que el citado señor dice que el apellido original es … ¡el nuestro!. Luego tuve ocasión de hablar con el señor, y me comentó que en un momento dado, en la historia de Brazuelo, un sacerdote decide escribirlos a todos como GILGADO. Seguramente, para aquel entonces, nuestros GIRGADO ya habían salido de Brazuelo.

Esto me llevaba al ultimo libro que tenía para acabar la jornada. Se trataba del último libro de baraja, de los cuatro que había en el pueblo antes de que bautismos, matrimonios y defunciones se separasen en sus libros respectivos. Me fui a la parte donde venían los matrimonios, y busqué hasta encontrar, la partida del matrimonio de BLAS GIRGADO con ANTONIA DE LA PUENTE. El era hijo de ROQUE GIRGADO y de MARIA FERRERO, ambos naturales de ¡Brazuelo!, y ella era hija de ANTONIO DE LA PUENTE y de MANUELA DE PAZ. Y la boda tuvo lugar en junio de 1802. Hasta aquí llegué, en esta ocasión con GIRGADO, hasta finales del siglo XVIII en Brazuelo (León).

Seguí buscando entre los matrimonios del libro y encontré referencias a diversos enlaces de sendas hermanas de ANTONIA DE LA PUENTE, con la particularidad de que hay una, de la que no me resisto a copiar aquí en parte:

“Tienen parentesco de consanguinidad de segundo con tercero por una parte y cuarto por otra de afinidad, y tercera consanguinidad”.

Fascinante. Pero el tiempo se acababa y había que seguir buscando. Encontré un matrimonio que inicialmente pensé que pertenecía al árbol, pero hoy con más detenimiento lo he puesto entre interrogaciones. Se trata de una boda entre ANDRES CRESPO y JUANA FRANCISCA BOTAS, pero hay tres detalles que no pasan desapercibidos:

1) La fecha (1782) es muy anterior a “lo que se espera”

2) La contrayente es Juana Francisca Botas, en contra de “lo esperado” (Juana Botas)

3) El contrayente ANDRES CRESPO, en esta partida dice que es natural de Santa Colomba, cuando en la partida de matrimonio de su hija dice que es natural de Castrillo

Al final opto por mantener la partida como perteneciente al árbol, pero con amplia reserva. Espero poder confirmar la veracidad o no mediante la partida de bautismo de JUANA CRESPO. Pero eso será para otro día.

El retorno de los GIRGADO (Parte 2 )

Acababa de agotar los cuatro libros que había pedido. Estaba muy satisfecho con los resultados obtenidos, pero aun quedaba casi hora y media para que el archivo cerrase. Pido los dos libros de bautizados anteriores de Castrillo y el de matrimonios de Santa Marina de Somoza, intentando aprovechar el cuarto grado de consanguinidad. No obstante, en la sala había otros investigadores con los libros de Castrillo y al final solo conseguí uno de los de bautizados (cuarto libro de baraja de la parroquia), y (por error, bendito error) el de bautizados de Santa Marina. A esas alturas de la mañana tenia tal “cacao” en la cabeza que junto con la efervescencia del éxito obtenido hasta el momento, motivó que no me percatase del error hasta el día siguiente. Como estaba convencido de que estaba ante el libro de matrimonios, me lancé, casi a contrarreloj, a buscar la partida del matrimonio de GABRIEL NIETO y de ANA MARIA MANZANAL, los padres de ANA MARIA NIETO. De pronto, se hizo ante mi una partida con uno de los nombres que yo buscaba: GABRIEL NIETO. Empecé a leer la partida, aunque más que leer lo que hacía era analizar a ver quienes eran los padres de el tal Gabriel. Para mi sorpresa, el padre de Gabriel Nieto se llamaba igual que él, mientras que la madre se llamaba… ¡Ana María Manzanal!... sorpresa y desconcierto… en aquel momento solo me vino a la cabeza que no era el que yo buscaba. Se trataba de un colateral. Precisando un poco más, hoy soy capaz de reconocer que se trata de el hermano de mi tatarabuela Ana María Nieto. Anoté el número del folio en el que aparecía y seguí rastreando, buscando apellidos que me resultasen familiares (NIETO y MANZANAL, en este caso), sin importarme si buscaba un matrimonio, un bautismo, o una defunción. Solo buscaba apellidos. No obstante, a efectos de mi árbol, acababa de descubrir los nombres de los abuelos de mi tatarabuela (es obvio que si los padres de dos hermanos son los mismos, los abuelos también). Los paternos eran TOMAS NIETO y TOMASA ROLDAN, mientras que los maternos eran JOSE ANTONIO MANZANAL y ANA MARIA GONZALEZ, los primeros de Santa Marina de Somoza, y los segundos de Santa Catalina de Somoza. Todos maragatos.

Seguí pasando páginas hacia adelante, hasta que se hizo ante mí, nada menos que la partida de bautismo de nada más y nada menos que Ana Maria Nieto. Esta vez sin embargo, lo primero que miré fue la fecha (había pasado demasiadas hojas) y el bautismo había ocurrido en 1795. ¡No puede ser!. Fue lo primero que pensé. Si la hubiese aceptado como mi tatarabuela, tendría casi 60 años cuando se casara con Tomás Girgado, al que además aventajaba en nada menos que 34 años. Era muy raro. Volé a ver el nombre de los padres y vi que se trataba de una hermana de Gabriel (el padre de Ana María). Sin saberlo en aquel momento, acababa de dar con los nombres de cuatro de los bisabuelos de mi tatarabuela. Los paternos SANTIAGO NIETO y ANA RAMOS (ambos de Santa Marina de Somoza) y los maternos MIGUEL ROLDAN y TOMASA ALONSO, de Murias de Rechivaldo. Seguí buscando, y además de varios colaterales más, encontré las partidas de los bautismos tanto de nuestra tatarabuela ANA MARIA NIETO como de su padre GABRIEL NIETO. Agotado o no el libro, lo que si se agotaba era el tiempo, y yo seguía empeñado en seguir el GIRGADO hasta que se fuese de Castrillo de los Polvazares. Por tradición oral, me había llegado por dos fuentes distintas que los GIRGADO eran de Brazuelo, y de hecho, sabía que en el interrogatorio del Catastro de Ensenada de Brazuelo se citaba a un tal Pascual JIRGADO

El retorno de los GIRGADO

Pude acceder a la ficha de los libros de Castrillo de los Polvazares, de donde sabía que eran naturales mi bisabuelo MANUEL GIRGADO NIETO y su padre TOMAS GIRGADO. La primera sorpresa fue descubrir que el libro 3º de bautizados de la parroquia, que en su día el director del Archivo me había dicho que faltaba, sigue sin estar en el Diocesano, pero porque se encuentra en la parroquia. Obtuve dos números de teléfono para poder contactar con el Párroco de Castrillo de los Polvazares. Mi primera intención era conseguir la partida de bautismo del bisabuelo, por lo que al dejarlo para otro momento, la siguiente persona que me interesaba era su padre, del que solo sabía que se llamaba Tomás GIRGADO, que era natural de Castrillo, y que en la partida de matrimonio de su hijo (en Ferrol) aparecía como vecino de Castrillo. Mi razonamiento fue que si era natural de allí, y muchos años después seguía en el mismo sitio, era muy razonable pensar que muriese allí (después de 1896, la fecha de la boda del hijo). Pedí el libro tercero de difuntos, que contiene las defunciones de los parroquianos ocurridas entre 1886 y 1966. Empecé a buscar al principio del libro. De haber aplicado la lógica de empezar a buscar en 1896 me hubiese hecho perderme el descubrimiento de que en 1899 falleció Francisca Girgado Nieto, hija de Tomás y Ana María (obviamente, hermana de mi bisabuelo) a la edad de 31 años, de una fiebre tifoidea. Otra de las aportaciones del hallazgo fueron los segundos apellidos de los padres TOMAS GIRGADO CRESPO y ANA MARIA NIETO MANZANAL. Seguí “peinando” el libro, y al llegar a 1920, me encontré con la partida buscada: la de defunción del tatarabuelo TOMAS GIRGADO, que por cierto, se llamaba TOMAS FERNANDO GIRGADO CRESPO, falleció a los 91 años de edad, y de su matrimonio con Ana María habían nacido siete hijos (uno de los cuales era mi bisabuelo). Ahora sabía que había nacido en torno a 1829. Seguí buscando en el mismo libro, por si pudiese estar la tatarabuela ANA MARIA (podía haber vuelto al pueblo, aunque si el marido tenía 91 años, ella también sería muy mayor). En 1923 la encontré a ella. Noventa y dos años; por tanto, debía haber nacido en 1831. Seguí buscando, tan solo por agotar el libro. Encontré otra hija del matrimonio (hermana de mi bisabuelo): Antonia que murió en 1925 y que tuvo cinco hijos (de apellidos ALONSO GIRGADO). Del mismo modo, descubrí otras hermanas y otra personas con apellido Girgado, poco relevantes en principio para seguir ascendiendo en el árbol (como anécdota, decir que una de ellas se apellidaba GILGADO GIRGADO).

Si bien el siguiente paso lógico hubiese sido buscar en el libro de bautismos la partida de TOMAS GIRGADO CRESPO (la mujer era de otro pueblo, y no la iba a buscar en esta sesión) del que ya tenía su año de nacimiento aproximado, e incluso me hubiese facilitado no solo los nombres de sus padres sino los de sus abuelos, el azar (por el orden de colocación de los libros) quiso que buscase la partida de matrimonio. Este paso era un poco arriesgado porque al ser ambos contrayentes de distintos pueblos, cabía pensar que la boda fuese en la parroquia de la novia (en este caso, Santa Marina de Somoza), pero el hecho de que después de casados viviesen, e incluso muriesen, en Castrillo me animó a intentarlo. Empecé a buscar desde el año de nacimiento del hijo (1866). Solo es una referencia, porque tengo encontrado matrimonios posteriores al nacimiento de algún hijo, pero por algún sitio hay que empezar. En 1854 encontré el matrimonio de mis tatarabuelos. Además de la fecha, y los nombres de sus padres (BLAS GIRGADO, JUANA CRESPO, GABRIEL NIETO, y ANA MARIA MANZANAL) descubrí que necesitaron una dispensa por cuarto grado de consanguinidad.

A continuación, paso al segundo libro de bautizados (1830 a 1852) donde sospecho que puede estar TOMAS. El libro, para mi sorpresa, tiene un índice al final, en el que puedo comprobar que el tatarabuelo no se encuentra. Pero como no había solicitado el primer libro de bautizados (1785 a 1830), me interesé por el otro libro que me quedaba sobre la mesa: el primero de matrimonios (1806 a 1852), para buscar el matrimonio de los padres de TOMAS. Use como fecha de referencia 1829, y no tardó en aparecer la partida de matrimonio de BLAS GIRGADO con JUANA CRESPO. En 1824 se casaron. Eran hijos de (otro) BLAS GIRGADO y ANTONIA DE LA PUENTE y ella de ANDRES CRESPO y JUANA BOTAS.